Averiguar el verdadero lugar, o lugares, de origen de los primeros podencos que se trajeron a Canarias es del todo imposible.
Españoles eran seguro, pero ¿De qué partes de España? Sabemos que los dromedarios, asnos, conejos, perdices, fueron traídos de Africa en distintas fechas; las yeguas, vacas, aves de corral, árboles frutales, semillas varias, perros de varias razas para desempeñar distintas funciones, se embarcaban en Sevilla destino Canarias.
Claro está, o al menos así queremos suponerlo, que las diversas razas caninas que se mencionan en los Acuerdos del Cabildo de Fuerteventura y de Tenerife, y en las Ordenanzas de Tenerife tendrían distinta procedencia.
EL PODENCO CANARIO ACTUAL
La diversidad de tipos en el Podenco Canario es enorme. En realidad, habría que hablar de familias de podencos canarios.
Es más, dejando de lado los podencos de siglos pasados, que no sabemos en que medida o proporción laten en los actuales, los cruces de las últimas décadas con podencos ibicencos de todo tipo y pelo, con pointer ingleses, bracos alemanes, etc. hacen que, en estos momentos, no se pueda hablar del podenco canario como si de una raza perfectamente definida y fijada de origen antiguo se tratara.
Diría más, para hacer honor a la verdad, la base genética de los actuales podencos canarios hay que buscarla en el podenco ibicenco.
No digo que el actual podenco canario sea un podenco ibicenco sin más, simplemente quiero decir que al haber sido la importación de podencos ibicencos tan frecuente en lo que va de siglo – seguramente en siglos anteriores se importaron en gran número para refrescar la sangre de los canarios, que a su vez eran producto de refrescos constantes, más el mestizaje al que se les sometía con las razas perdigueras dichas -, el actual, aún con toda su diversidad, se asemeja más al baleárico que ningún otro.
Cierto que el modo de cazar de la mayoría de los podencos canarios, dejando de lado los mestizos de primera o segunda generación de podenco ibicenco, es algo distinto.
Por regla general, los podencos canarios son mucho más constantes en el cazadero, al conejo lo buscan incansablemente en las paredes de piedra seca, en las grietas de las lavas volcánicas, en la maleza, moviendo alegremente el rabo sin parar y, salvo raras excepciones, no están pendientes unos de otros, cosa que sí suelen hacer los podencos ibicencos; sólo cuando uno halla un conejo y lo corre, o lo “llama” donde quiera que se encuentre, acuden todos a la cuadrilla.
Muchos podencos canarios cuando persiguen al conejo que huye entre el monte bajo salta en el aire (como los podencos ibicencos) para no perderlo de vista. Este comportamiento se da con menos frecuencia en aquellos ejemplares que arrastran un mestizaje importante con Pointer inglés o braco alemán.
ESTÁNDAR DE LA RAZA
- Aspecto General: Es un perro de talla media, ligeramente alargado leptosomático, ligero y muy resistente.
- Proporciones importantes: Ligeramente más largo que alto. Pecho bien desarrollado, sin llegar al codo, hocico ligeramente más largo que el cráneo.
- Comportamiento y temperamento: Valiente, nervioso, inquieto e irradiando dinamismo. Noble, nunca agresivo. Abnegadamente adicto a su dueño. Soportan estoicamente las más rigurosas jornadas sin la menor fatiga.
- Cabeza: Alargada, en forma de cono truncado, muy proporcionada con el cuerpo, midiendo de largo 21 – 22 cms. Líneas cráneo faciales paralelas.
- Región craneal: Cráneo: más largo que ancho, plano, con hueso occipital prominente.
- Stop: No muy marcado
- Región facial:
- Trufa: Ancha, color carne, armonizado el color con el pelaje, fosas nasales algo abiertas.
- Hocico: Prominente y ancho, acabado en romo, de color carne con más o menos intensidad en armonía con el color del pelaje.
- Labios: Finos y recogidos, armonizados con el color de la nariz.
- Dientes: Mordida en tijera, en perfecta oposición y bien desarrollados.
- Ojos: Oblicuos, almendrados y pequeños. De color ámbar más o menos oscuros y depende su intensidad del color de la capa. Su mirada es inteligente y noble.
- Orejas: Más bien grandes. En atención se levantan erguidas, ligeramente divergentes. Las echa para atrás en reposo. Anchas en su base y puntiagudas en su extremo.
- Cuello: Musculoso, recto, con la piel lisa, sin papada, flexible y redondeado.
- Cuerpo
- Dorso: Fuerte, musculoso, apto para la carrera y ejercicio de caza
- Lomo: algo alargado.
- Grupa: Huesos de la grupa algo salidos, más visibles en los ejemplares flacos o en plena época de caza.
- Pecho: con esternón no saliente, bien desarrollado, pero sin embargo no llega al codo. Costillas ovaladas. Perímetro torácico mayor en 5 a 8 cms que la altura a la cruz.
- Pelo: corto, liso y apretado.
- Color: Preferentemente rojo y blanco, el rojo puede ser más o menos intenso, llegando del naranja al rojo oscuro (caoba). Todas las combinaciones de estos colores.
- Altura y peso: De 55 a 64 cms para los machos y 53 a 60 para las hembras, aunque debido a los distintos terrenos en donde vive y caza estas medidas pueden variar, por lo tanto se pueden aceptar diferencias en 2 cms por encima o debajo de las tallas máxima y mínima, siempre que los ejemplares sean típicos y con el prototipo de la raza.
Faltas: Cualquier desviación de los criterios antes mencionados se consideran como falta y la gravedad de ésta se considera al grado de la desviación al estándar.
Faltas Graves:
- Cabeza excesivamente ancha
- Stop demasiado marcado
- Labios colgantes
- Falta de premolares
- Prognatismo
- Orejas muy divergentes
- Pecho plano
- Esternón saliente
- Cola enroscada
- Corvejones bajos y de vaca
- Cruce de pies delanteros y corvejones en la marcha
- Temperamento agresivo
Nota: Los machos deben tener los testículos de apariencia normal, completamente descendidos en el escroto.