El Pekinés es una raza de perro con un legado imperial y una presencia que desmiente su pequeño tamaño. Originaria de China, esta raza milenaria ha sido desde siempre símbolo de estatus y buena suerte, conquistando corazones alrededor del mundo con su carisma único y su pelaje exuberante.
Conocido por su carácter independiente y su aspecto digno, el perro Pekinés ha mantenido su popularidad gracias a su personalidad afable y su aspecto majestuoso. Pero, más allá de su belleza, los Pekineses requieren una serie de cuidados específicos que cualquier dueño potencial debe conocer antes de abrirle las puertas de su hogar.
Origen del Pekinés
El Pekinés tiene una historia fascinante que se remonta a más de 4.000 años atrás en la antigua China. Estos perros eran los favoritos dentro de la familia imperial y la nobleza china, donde eran considerados un tesoro nacional y un símbolo de prestigio. Se cree que los monjes budistas también tuvieron un rol importante en el desarrollo de la raza.
Llegaron a Europa en el siglo XIX, específicamente durante la Segunda Guerra del Opio, cuando se saquearon los palacios imperiales y varios ejemplares fueron llevados a Inglaterra. Allí, la raza llamó la atención de la aristocracia y rápidamente ganó popularidad.
La raza se mantuvo en su forma pura durante siglos debido a las prohibiciones de exportación desde China. Sin embargo, con su llegada a Europa, el Pekinés se diseminó por el mundo y capturó los corazones de muchos fuera de su tierra natal.
Características físicas del Pekinés
El físico del perro Pekinés es distinguido por su pequeño tamaño y su gran melena, que recuerda a la de un león. Poseen una cabeza grande en relación con su cuerpo, ojos oscuros y expresivos, y una nariz chata que les da un perfil particular conocido como «morro de aplastado».
- Su tamaño es pequeño, generalmente pesa entre 3,2 y 6,4 kilogramos.
- Cuentan con un pelaje largo y grueso que requiere de cuidados frecuentes para mantenerse en condiciones óptimas.
- Sus orejas son en forma de corazón y están cubiertas de pelaje largo.
- Su cola es de implantación alta y la llevan orgullosamente arqueada sobre el lomo.
Las características del perro Pekinés no son solo físicas, sino que también se extienden a su temperamento. Son perros valientes y seguros de sí mismos, a menudo percibidos como distantes o independientes.
Carácter del Pekinés
El carácter del Pekinés es uno de los rasgos más distintivos de la raza. A pesar de su tamaño pequeño, tienen una personalidad grande y dominante. Son valientes, incluso a veces desafiando a perros mucho más grandes que ellos.
Se vinculan profundamente con su familia y suelen ser reservados con los extraños, lo que puede hacer que sean excelentes perros guardianes. Aunque no son excesivamente ladradores, alertarán a sus dueños ante la presencia de intrusos.
Los Pekineses son conocidos por ser algo tercos, lo que puede presentar desafíos en su entrenamiento. Sin embargo, responden bien a un adiestramiento positivo y a la paciencia.
Es importante socializarlos desde temprana edad para fomentar su confianza y asegurar que sean perros equilibrados y amigables.
En cuanto a su convivencia con otros perros y mascotas, puede variar. Algunos Pekineses son sociables y disfrutan de la compañía, mientras que otros prefieren ser el único animal en el hogar.
Cuidados del Pekinés
Los cuidados del Pekinés son cruciales para mantener su bienestar y salud. Su pelaje, aunque hermoso, requiere de un cepillado frecuente para evitar enredos y acumulación de suciedad. Además, es importante estar atentos a posibles problemas de piel.
Debido a su estructura facial, el Pekinés es propenso a sufrir de problemas respiratorios. Es importante evitar exponerlos a temperaturas extremas y asegurarse de que su ejercicio sea moderado, especialmente en días calurosos.
La alimentación del Pekinés debe ser equilibrada y adaptada a su nivel de actividad física. Consultar con un veterinario es la mejor manera de establecer una dieta adecuada que cubra todas sus necesidades nutricionales.
En cuanto a su salud dental, hay que prestar especial atención, ya que al tener la boca pequeña, tienden a acumular sarro con más facilidad. Una higiene bucal regular es imprescindible para evitar enfermedades periodontales.
A pesar de ser un perro de interior, los Pekineses necesitan paseos diarios para mantenerse en forma y estimular su mente. Sin embargo, estos no deben ser demasiado largos ni extenuantes.
Enfermedades comunes del Pekinés
La salud del Pekinés puede verse afectada por varios problemas hereditarios y condiciones relacionadas con su morfología. Entre las enfermedades comunes, encontramos:
- Problemas respiratorios debido a su nariz corta.
- Problemas de piel como dermatitis y alergias.
- Problemas oculares, incluyendo úlceras de córnea por su exposición.
- Problemas dentales causados por la acumulación de sarro y la falta de espacio en la mandíbula.
- Enfermedades del corazón, especialmente en perros mayores.
Para prevenir y controlar estas afecciones, es esencial realizar visitas periódicas al veterinario y seguir sus recomendaciones sobre vacunaciones, desparasitaciones y cuidados generales.
El Pekinés es una raza de larga esperanza de vida, alcanzando a veces los 15 años. Sin embargo, su bienestar a largo plazo depende en gran medida de los cuidados que reciban a lo largo de su vida.
¿Es el Pekinés un perro adecuado para mí?
Decidir si el Pekinés es el perro adecuado para ti requiere considerar varios aspectos de tu estilo de vida y de lo que puedes ofrecerle. Es una raza que se adapta bien a la vida en apartamentos debido a su tamaño y su nivel de actividad generalmente bajo.
Si buscas un compañero leal, con mucha personalidad y que disfrute de largas sesiones de mimos en el sofá, el Pekinés podría ser una buena elección. Sin embargo, si prefieres un perro más activo y menos propenso a problemas de salud, quizás debas considerar otras razas.
El costo de adquirir un Pekinés puede variar, pero es importante no basar la decisión únicamente en el precio de un perro Pekinés. Los gastos de mantenimiento, cuidados veterinarios y posibles problemas de salud deben ser parte de tu evaluación.
Asegúrate de investigar criadores responsables, que no promuevan la cría extrema y que se preocupen por la salud y el bienestar de sus perros.
Preguntas relacionadas sobre el cuidado y selección del Pekinés
¿Cuánto vale un perro Pekinés?
El precio de un perro Pekinés puede variar dependiendo de factores como el linaje y si el perro tiene pedigrí. Generalmente, los precios oscilan entre los 600 y 1.000 euros.
Es importante tener en cuenta que, más allá del costo inicial, existen gastos relacionados con su salud, alimentación y cuidados generales que deben ser considerados antes de adquirir un Pekinés.
¿Cómo saber si un perro es de raza Pekinés?
Para identificar a un Pekinés, se deben observar sus características físicas distintivas: un cuerpo compacto, cara plana, y un pelaje exuberante. Un criador reputado podrá proporcionarte documentos que certifiquen su pedigrí.
Además, la autenticidad de la raza puede ser confirmada mediante pruebas genéticas realizadas por un veterinario.
¿Cuánto cuesta un cachorro Pekinés?
El coste de un cachorro Pekinés es similar al de un adulto, variando entre 600 y 1.000 euros. Es aconsejable adquirir cachorros de criadores responsables, los cuales deberían permitirte ver las condiciones en las que viven los animales y conocer a los padres del cachorro.
Recuerda que al comprar un cachorro, estás asumiendo la responsabilidad de su entrenamiento y socialización durante una etapa crítica de su desarrollo.
¿Cuántas veces al día debe comer un perro Pekinés?
La alimentación del Pekinés debe ser balanceada y adecuada a su tamaño y nivel de actividad. Generalmente, se recomienda alimentar a un adulto dos veces al día con porciones ajustadas a sus necesidades calóricas específicas.
Los cachorros, por otro lado, suelen necesitar comer tres o cuatro veces al día en porciones más pequeñas. Consulta siempre con un veterinario para establecer un plan de alimentación óptimo.
En el siguiente vídeo, podrás ver más sobre la vida cotidiana de un Pekinés y cómo disfrutan de su rutina diaria:
En resumen, el Pekinés es mucho más que un rostro adorable y un pelaje suntuoso. Es una raza con una historia rica y un carácter fuerte que requiere de cuidados específicos pero que, a cambio, ofrece lealtad y compañía inigualable. Antes de dar la bienvenida a un Pekinés en tu vida, asegúrate de estar dispuesto a brindarle el amor y la atención que merece.